El término elección alude al acto y la consecuencia de elegir : seleccionar o escoger algo o a alguien . El concepto proviene del vocablo latino electio.

Todas las personas eligen a cada instante. Qué desayunar y cómo vestirse para salir de casa, por ejemplo, son elecciones que la mayoría de la gente realiza diariamente apenas se despierta.
Una elección, en esencia, es el resultado de un proceso mental a través del cual se analizan diferentes alternativas y se opta por una de acuerdo a la conveniencia o a la valoración que se le atribuye . Supongamos que un hombre desea comprar un teléfono nuevo: después de estudiar los diversos equipos disponibles, debe elegir uno según los recursos que dispone y sus intereses. La elección, en este caso, implica concretar la adquisición de un aparato telefónico en particular.
Existen múltiples tipos de elecciones: racionales, impulsivas, tomadas luego de mucho tiempo de reflexión, decididas de manera urgente, etc. En ocasiones, que haya numerosas opciones dificulta la elección, ya que la comparación de todas las posibilidades puede resultar compleja.
Cuando la noción se emplea en plural (elecciones ), suele aludir al mecanismo democrático que permite a los ciudadanos, a través del sufragio , designar a los dirigentes que ejercerán cargos políticos. Las elecciones, de este modo, facilitan que los individuos tomen decisiones vinculadas a la gestión y la administración de los asuntos públicos .
Aunque el modo de desarrollo de las elecciones depende de cada país , lo habitual es que haya candidatos que se postulen para ocupar los cargos. Los habitantes, de este modo, tienen que votar para definir a quién o a quiénes les conceden la responsabilidad.